A LOS COMPAÑEROS DE OSBA

Es evidente que aún seguimos inmersos en una crisis que seguramente nos acompañará por algún tiempo.

OSBA no es una Institución común, está sujeta a la presión de factores políticos y gremiales, que aunque decadentes, no renuncian a seguir manteniendo la hegemonía de poder, que nos llevó a este estado de virtual quiebra institucional. Lejos están los reales responsables, de reconocer sus errores, limitaciones y actos de corrupción, para luego dejar tranquilamente que se realice un paulatino proceso de reconstrucción, por el contrario, maniobran perversamente para desestabilizarlo y asfixiarlo sin importarles demasiado las consecuencias terribles que le ocasionan a la salud de la familia bancaria.

Veamos: 1-Operan canallescamente sobre los prestadores para que estos no suministren sus servicios a la OSBA.- 2-Seccionales del interior del país de la Bancaria que desde hace años tienen sus servicios cortados, ahora reclaman con acciones legales cuando antes ni abrían la boca.- 3-Especulan a través de sus permeables influencias dentro de las Cámaras de Bancos, y lo que le queda de sus relaciones en el Ejecutivo para obstaculizar toda gestión encarada desde la Obra Social.- 4-Siguen utilizando al elemento residual, que está mezclado dentro de la dotación y se desplaza en todos los niveles jerárquicos, para generar intriga, desconfianza y miedo, como lo hicieron siempre.

Es que son muy fuertes los intereses que están en juego. Los hay financieros, referidos al manejo de los fondos del APE. Y los hay políticos, ya que la Bancaria, es el único gremio conducido por uno de “los gordos” que tiene su Obra Social intervenida, más aún, su conducción está seriamente comprometida en la causa penal que lleva adelante el Juez Oyarbide, marcando un antes y un después, que seguramente impactará sobre el resto del Movimiento Obrero. Esto que expresamos no es un dato menor, porque se está desarrollando en medio de un contexto político-gremial que revalida la discusión sobre la verdadera representatividad de las actuales estructuras sindicales nacionales, fundamentalmente la de los llamados “gordos”, que son vistas por la sociedad como caducas y decrépitas.

Por lo cual, no nos cabe la menor duda, lo que más le daña a la burocracia enquistada en la Bancaria, es el reconocimiento que estamos obteniendo sobre nuestro derecho a organizarnos gremialmente. Porque saben que esa organización será la más poderosa barrera que ellos no podrán sobrepasar, y que este proceso es parte de la búsqueda que tenemos todos los Trabajadores, por encontrar formas más legítimas de representación para luchar por nuestros derechos, por encima de las estructuras burocráticas que lo impidiendo sistemáticamente.

En otro orden de cosas y ante la necesidad a marcar lo bueno y lo malo de la actual gestión, destacamos que las actuales autoridades han dado señales interesantes y positivas, tales como el reconocimiento gremial antes mencionado, la disposición de cubrir cargos a través de concurso, el proyecto de crear una intendencia en la POBA y un área de control de patrimonio, la reapertura de la farmacia ambulatoria de POBA con administración propia de la OSBA, y la implementación de medidas financieras tendientes a un mejor control del presupuesto y la discriminación de la deuda legítima e ilegítima, a través del concurso de acreedores. Resaltamos que la mayoría de estas medidas podrán realizarse, si existe una participación activa de los Trabajadores. Con absoluta seguridad afirmamos que la reconstrucción de la Obra Social será posible, en tanto los Trabajadores recuperemos el rol protagónico en este cambio, porque la participación de los Trabajadores es intensamente valiosa en el campo institucional, como queda demostrado en la historia de lucha del conjunto del Movimiento Obrero.

Es desde este lugar protagónico y valorando las mejores intenciones esbozadas hasta acá, que nos asiste el derecho a la duda. A nadie le resulta extraño analizar que este proceso de reconstrucción es arduo, sumamente difícil, que requiere tiempo y de los mejores recursos materiales y humanos. Por lo que resulta contradictorio para la inmensa mayoría del personal, que se siga recibiendo directivas de personajes irritantes a la memoria colectiva, las qué en plena hegemonía de la anterior administración, hicieron una versión local de “la obediencia debida”, siendo su brazo funcional y ejecutor de medidas injustas y represivas. Nos referimos puntualmente a las jefaturas de Personal, de Subdirección Médica, de Sucursales y Consultorios Periféricos, de Enfermería, y de jefes de Área. Es nuestra obligación ante nuestros Compañeros expresarlo, pero también lo es, ante el compromiso asumido de participar activamente en el mejoramiento de la OSBA.

Hoy estamos concluyendo el ciclo por el cual surgirán a través del ejercicio democrático, los Delegados de Base que representarán a todos los sectores de OSBA de todo el país, este ciclo está realizándose con un alto grado de participación, un gran entusiasmo y fervor, en donde no faltaron las lógicas discrepancias, después de 13 años sin práctica gremial es totalmente entendible que aparecieran, pero es de destacar el respeto, la responsabilidad y el compromiso con que el conjunto de los Compañeros, asumió la concreción de este acontecimiento histórico para todos los Trabajadores de OSBA.

Haber llegado a este momento ha costado muchísimo esfuerzo, sufriendo angustias e injusticias. Sin embargo aún nos queda muchísimo más por construir. Hay que consolidar la organización y contribuir activamente en la reconstrucción de la Obra Social, dos objetivos que están intrínsicamente relacionados.

COMISIÓN DIRECTIVA PROVISORIA DE UTOSBA

(Unión de Trabajadores de OSBA)