sábado, 6 de junio de 2009

EL Cro. PEDRO ES RESTITUIDO A SU GENUINO LUGAR DE TRABAJO

PORQUE ES UN ACTO DE JUSTICIA


…Cuando la patronal aplica sanciones injustas y ejecuta pases
injustificados, ejerce violencia.
…Cuando nos niega nuestros derechos gremiales, ejerce violencia
…Cuando impone un contexto laboral de maltrato, ejerce violencia.
…Cuando miente y trata de echar culpas al personal por la crisis,
ejerce violencia.

A los trabajadores, nos asiste la verdad y la razón, es por eso que
luchamos por nuestros derechos arrebatados, y por derecho
propio, elegimos democráticamente a nuestros propios
representantes gremiales.
Es violento que el poder no lo reconozca y quiera impedirlo.

El Cro. PEDRO ALONSO, es injustamente sancionado. Porque los
violentos no soportan, que los trabajadores nos organicemos, y castigan
a los líderes naturales que encabezan el proceso de organización.

El Cro. PEDRO ALONSO, es restituido a su genuino lugar de trabajo,
porque esta vez y en buena hora, la justicia laboral falló a favor
del sentido común y la racionalidad.

Pero fundamentalmente, hemos sido los trabajadores los que
hemos decidido que PEDRO vuelva.
Ya lo habíamos empezado a traer en la Asamblea del 25 de
Abril, cuando materializamos la herramienta gremial que nos
contiene a todos.
Ya no somos vulnerables,
Ya no estamos solos.
Nos acompañamos, nos protegemos y la peleamos.

COMISIÓN DIRECTIVA PROVISORIA

(UTOSBA)

1 comentario:

Anónimo dijo...

El peor analfabeto es el analfabeto político.

El no ve,no habla,no participa
de los acontecimientos políticos.

El no sabe que el costo de vida,
el precio del poroto,del pescado,
de la harina,del alquiler,
del calzado o el remedio, dependen de decisiones políticas.

El analfabeto político es tan burro
que se enorgullece e hincha el pecho
diciendo que odia la política.
No sabe,el imbécil,que de su ignorancia política,nace la prostituta,
el menor abandonado,
el asaltante,y el peor de los bandidos,
que es el político corrupto
y lacayo de las empresas
Nacionales y Multinacionales.


Bertolt Brecht.